Con la llegada del buen tiempo, apetece disfrutar de la terraza, el patio o el balcón. Pero después del invierno, lo más común es encontrar suciedad acumulada, moho, hojas secas, y un suelo que ha perdido su brillo. En este artículo te enseñamos cómo dejar tu espacio exterior impecable con solo 4 pasos y los productos adecuados.

1. Retira restos grandes y barre a fondo

Antes de usar cualquier producto, elimina hojas secas, tierra, ramas o restos de decoración que hayan quedado abandonados. Una escoba rígida o un soplador te ayudará a dejar todo listo para una limpieza profunda.
👉 Consejo: Asegúrate de mover macetas y muebles para limpiar debajo.

2. Elimina moho, verdín y manchas del suelo

Con la humedad del invierno, es normal que aparezca moho, musgo o verdín en baldosas, piedra, hormigón o madera tratada. Para eliminarlo sin esfuerzo ni necesidad de frotar, usa un limpiador específico, como nuestro Limpiador Antimoho. Basta con aplicar, dejar actuar unos minutos y enjuagar.

🧴 ¿Por qué usar un producto especializado?

Porque limpia a fondo sin dañar las superficies, ni siquiera las más delicadas, y evita que el moho vuelva a aparecer pronto.

3. Limpia los muebles de exterior

Los muebles de jardín también necesitan un buen repaso. Usa un trapo húmedo y un poco de limpiador multiusos para eliminar polvo, marcas de agua o restos de polen. Si son de plástico, puedes aplicar el mismo producto que usaste para el suelo, diluido en agua.

💡 Tip: No uses productos abrasivos ni esponjas metálicas, ya que pueden rayar o dañar el acabado.

4. No olvides las lonas, toldos y sombrillas

Las lonas, toldos y sombrillas suelen acumular polvo, moho, manchas de agua y suciedad difícil de quitar con solo agua. Para dejarlos como nuevos sin estropearlos, te recomendamos usar un limpiador específico para lonas, como nuestro Limpiador de Toldos y  Lonas Profesional.

🧴 ¿Qué lo hace especial?

    Elimina manchas y moho sin decolorar la tela

    No daña la impermeabilización

    Ideal para toldos, sombrillas, fundas de muebles y más

    Aplicación fácil: pulveriza, deja actuar unos minutos y aclara

✨ Dale a tu terraza un aspecto cuidado de arriba a abajo, incluyendo esos detalles que suelen pasarse por alto.

5. Toques finales: cristales, barandillas y decoración

No olvides los detalles: limpia bien las barandillas, las ventanas o puertas correderas con un limpiacristales potente. Si tienes farolillos, maceteros o adornos decorativos, dales un repaso con un paño y un poco de desinfectante.
Resultado: una terraza reluciente lista para disfrutar

Siguiendo estos pasos, tu terraza quedará como nueva y lista para comidas al sol, tardes de lectura o noches de verano. Además, con productos profesionales, ahorrarás tiempo, esfuerzo y obtendrás un resultado duradero.

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